El certamen de Miss Universo 2024 ha sido uno de los eventos más esperados del año, especialmente por su emblemático desfile de trajes típicos que resaltan la diversidad cultural de los países participantes. Esta edición, celebrada en la Ciudad de México, reunió a 127 concursantes que se presentaron con impresionantes atuendos tradicionales que no solo destacaron por su belleza, sino también por su mensaje cultural y sostenibilidad.
Entre los trajes más aclamados se encontraron los de Miss México, Miss Tailandia y Miss Nigeria. Miss México, María Fernanda Beltrán, sorprendió con un traje inspirado en la cultura azteca, adornado con plumas multicolores y detalles que representaban la herencia indígena del país.
Por su parte, Miss Tailandia, Suchata Chuangsri, se robó los aplausos con un atuendo inspirado en los templos budistas, que incorporaba elementos dorados y plateados con intrincados bordados a mano, destacando la artesanía de su país.
Finalmente, Miss Nigeria, Chidimma Adetshina, optó por un diseño que celebraba la cultura yoruba, con una capa real confeccionada en tejidos tradicionales y accesorios dorados, resaltando la majestuosidad de su tierra natal.
Además de estos diseños espectaculares, el evento también incluyó una pasarela con enfoque en la sostenibilidad, donde algunas concursantes lucieron trajes elaborados con materiales reciclados. Este año, la competencia mostró un fuerte compromiso con la moda responsable, destacando cómo la belleza y la conciencia ambiental pueden ir de la mano.
El desfile en trajes típicos es una de las etapas más emblemáticas y esperadas del certamen de Miss Universo, ya que permite a las concursantes mostrar la riqueza cultural y las tradiciones de sus países de origen.
Estos trajes no solo son una celebración de la diversidad étnica y folclórica, sino que también cuentan historias a través de sus detalles, colores y simbolismos. Los diseños suelen incorporar elementos históricos, artesanales y a veces hasta materiales sostenibles, lo que añade un significado profundo a cada atuendo.
Al destacar sus raíces culturales, las concursantes rinden homenaje a su patria y sus orígenes, promoviendo el orgullo nacional en un escenario global. Esta sección del certamen también subraya la importancia de la identidad cultural y cómo la moda puede ser una herramienta poderosa para el storytelling y la representación artística en un contexto internacional
El certamen culminó con la esperada final el 16 de noviembre, donde se coronó a la nueva Miss Universo, Victoria Kjaer, la representa de Dinamarca, quien llevará la nueva corona “Lumière de l’Infini”, adornada con 23 perlas doradas, creada por la casa de joyería filipina Jewelmer.