La Casa Real británica ha tomado una drástica decisión luego del asalto al Castillo de Windsor, el cual se dio durante el pasado mes de octubre. Una situación que, además, preocupó bastante ya que la seguridad de los royals se pudo haber visto comprometida.
Según la información dada a conocer por la prensa inglesa, dos sujetos encapuchados lograron acceder a la finca la noche del pasado 13 de octubre y robaron el área de Shaw Farm, una granja cercana a Adelaide Cottage, la residencia del príncipe William y Kate Middleton. De hecho, los medios señalan que al momenta del asalto, tanto ellos como sus hijos se encontraban durmiendo en su casa.
En cuanto a los detalles del robo, estas personas saltaron la valla de seguridad que rodea al castilo para infiltrarse a la propiedad para después bloquear y forzar la puerta de seguridad utilizando un camión. Luego, entraron a la granja se llevaron de ahí una camioneta Isuzu negra y un quad rojo.
El Castillo de Windsor ampliará su personal tras el robo
Así pues, tras este incidente, el Castillo de Windsor ha decidido buscar personal para su plantilla ya que salió a la luz que está una vacante para trabajar en este recinto. En tanto que la persona que ocupe el puesto que ofrece la Casa Real deberá encargarse de funciones como la conservación de las obras de arte, organizar las tareas domésticas a diario además de la limpieza de todas las estancias de la finca.
También, la vacante sería a tiempo completo ya que se deberán cubrir 40 horas semanales. Además que ofrece algunos beneficios como 25 días de vacaciones al año, un plan de pensiones no contributivo, un almuerzo diario y atención psicológica para el candidato seleccionado. Sin embargo, lo único que no se especifica es el sueldo a ofrecer para el puesto. Aunque se estima que este ronde las 22.000 libras esterlinas anuales, lo que equivaldría a unos 26.000 euros.
Actualmente, el castillo de Windsor cuenta con casi 500 empleados a tiempo completo, quienes forman parte del personal que también trabaja en otras residencias reales como el Palacio de Buckingham y Clarence House.
Estos empleados incluyen desde personal de mantenimiento y seguridad hasta asistentes encargados de ceremonias, cocina y limpieza. La cifra refleja la operación constante necesaria para mantener este castillo funcional, tanto como residencia de la Familia Real Británica como un sitio turístico de gran relevancia histórica y cultural.